¿De verdad queremos que la sociedad conozca que hace una enfermera?: 5 claves para la reflexión y la acción


Publicado el 17/02/2014, en Colaboraciones, Enfermería hoy. Sin comentarios

Serafín Fernández-Salazar es enfermero y creador, junto con Antonio Jesús Ramos-Morcillo de “La Factoría Cuidando”, un proyecto profesional dedicado a la salud y los cuidados, y en el que se incluyen las webs: www.cuidando.es, www.cuidando.org y www.diferenciate.org. En este post desvela sus claves para hacer más visible la profesión enfermera.

Recibo un mail de Helena Gil (periodista responsable de la web, Soy Enfermera). Me pide que escriba un post para su espacio. La temática, me dice, es “que ponga en valor la profesión enfermera”. Me suena todo esto. Durante tres años hemos realizado una jornada virtual, con la ayuda de muchas personas, donde hemos tratado de poner en valor los cuidados que facilitamos las enfermeras. Tras invertir muchos esfuerzos en la realización de esta iniciativa, pensamos que Internet y las Redes sociales pueden ayudarnos a mostrar una imagen más favorable de las enfermeras, pero no es suficiente.

Y entonces, recuerdo este Tweet, publicado el 12 de Mayo del 2012:

tuit

También me viene a la cabeza esta publicación, realizada días después. Hoy, quisiera compartirla de nuevo con vosotros, porque aunque ha pasado algún tiempo, sigue estando vigente. Como verás, describe cada una de las claves que comenté en este tweet.

Actitud: Independientemente de cualquier movimiento o acción que realicemos de manera conjunta para avanzar en nuestra profesión, debemos pensar que a nivel individual podemos hacer mucho más. Hace tiempo escuché a Manuel Amezcua (Fundación Index) reflexionar sobre el siguiente tema: “Las enfermeras tenemos derecho a quejarnos, no a lamentarnos”. Los discursos de “yo paso” “a mí no me cuentes historias” “yo vengo a las 8 y me voy a las tres”, etc., no nos llevan a ningún lado. No se trata de construir grandes torres, simplemente de reflexionar y actuar pensando que es posible cambiar, tal y como viene reflejado en el Credo Enfermero de Rosa María Nieto.

Responsabilidad: María José Freire, en un editorial de la Revista Tesela, compartía una reflexión muy acertada sobre el papel que tenemos las enfermeras en la aplicación de evidencias:

“El compromiso con el paciente requiere de una actitud profesional y esto equivale a responsabilidad. Ser responsable es ser competente, y para ser competente hay que mantenerse actualizado”

Y partiendo de esta premisa, vendrían los dos puntos siguientes.

Metodología: José Miguel Morales-Asencio, en un artículo imprescindible nos habla del «pasar del hacer por hacer al hacer para obtener«. Esto es clave para nuestra profesión, y no hablamos solo de metodología enfermera. Se trata de un proceso en el que los resultados son muy importantes y que condicionan todo. ¿Verdaderamente pensamos en lo que deseamos conseguir cuando facilitamos nuestros cuidados? En este artículo, puedes ver cómo la investigación de resultados es el camino para conseguir la excelencia en los mismos.

Investigación en Evidencias: Tenemos que desechar el concepto de que la investigación es solo para unos pocos. Es cierto que no todos tenemos habilidades para investigar, pero si tenemos que ser capaces de buscar respuestas a nuestras preguntas. Interiorizar esa búsqueda nos ofrece muchas cosas. Si conozco las bases de datos podré encontrar información, leer los artículos, estar actualizado, además de opinar y discutir con otros profesionales de “tú a tú” con un respaldo científico detrás. Mientras no superemos estas barreras no tendremos nada que hacer. Y no nos equivoquemos: si no se hacer investigación SI debo consumir investigación.

Comunicación: Las enfermeras tenemos que ser conscientes de la importancia que tiene una buena comunicación con los pacientes, con otros profesionales y con la sociedad, ¿Los receptores de nuestros cuidados son conscientes de los cuidados que les prestamos?

Como ves, todo estos puntos no son nada nuevos, sabemos que están ahí, pero o bien no le damos la importancia que tienen o pensamos que no nos sirven para nada ¿no sabemos a dónde vamos? ¿No tenemos un «norte»?.

Por otro lado, no todo es tan bonito, porque ¿qué es lo quieren verdaderamente las enfermeras? Seamos francos. Los lamentos forman parte de nuestro día a día. Todos somos conscientes de que las condiciones laborales, el devenir de nuestra profesión, la falta de liderazgo, los miles de frentes que tenemos abiertos, etc. Todo esto no nos ayuda demasiado y merma nuestra capacidad de reflexión y de acción, pero verdaderamente ¿no podemos hacer algo más?

Si dejamos el liderazgo a otros, las discusiones a otros, la investigación a otros, la comunicación a otros, la actitud a otro, la visibilidad a otros… entonces ¿Qué hago yo? NADA.

Necesitamos construir, pero para eso, tenemos que querer y lo mismo resulta, que no queremos. Que nos da igual. Sigamos trabajando también todo esto. Continuemos motivando, reflexionado y visibilizando lo que hacemos, pero partiendo de un angustioso punto: QUERER.

Nosotros lo tenemos claro. Seguimos al turrón y apostamos por estas 5 claves: ¿Y tú?





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